Descripción de los arquitectos. 01. Restricciones:
La volumetría general, altura, ancho, retiros y distribución del programa constituyen algunos de los aspectos físicos que la municipalidad regula de manera estricta en esta zona de Bogotá.
Gran parte del volumen de las edificaciones definidas bajo estos parámetros está ya prefigurado, sobre todo cuando las lógicas del comercio llevan a construir la totalidad de los metros cuadrados y cúbicos permitidos.
Este hotel configura un intento por abrir o permear la norma: es esbelto y presenta cuatro fachadas abiertas debido a los retiros laterales; las fachadas mayores se retranquean para permitir una doble piel de metal y vidrio, y la fachada principal se articula a la vida urbana y vuela los 1,5 m que permite la regulación.
El acceso vehicular se ubica al mismo nivel que el peatonal, esto permite un nivel adicional de habitaciones y los espacios comunes ocupan el sótano que cuenta con entradas de luz cenital.
02. Perforaciones, Ventanas, Pasillos, Voladizos:
La edificación se entiende como el apilamiento de pequeñas habitaciones articuladas por un pasillo central; de manera simultánea, se identifica como la sumatoria en vertical de tres tipos de ventanas y relaciones visuales con la ciudad: las que se controlan mediante persianas metálicas, fijas y perforadas, las que definen con superficie acristalada el tamaño completo de las habitaciones y las que van en voladizo sobre la calle principal, que en algunos casos funcionan como pequeñas salas de remate de las circulaciones.
Mientras las habitaciones permiten observar la vida urbana y el paisaje: los cerros habitados, la ciudad homogénea de ladrillo, la sabana de Bogotá y los espacios cercanos al parque de la 93, la imagen exterior del edificio corresponde con la vida y el uso interior y cotidiano de las habitaciones y pasillos.