Descripción de los arquitectos. La Cabina Quemada es un refugio mínimo emplazado en un lugar apartado de la Cordillera de la costa en las cercanías de Santiago. Se llega a él por un camino zigzagueante, anterior a las carreteras y automóviles, que solía conectar la capital con el puerto de Valparaíso a través de la Cuesta de la Dormida, y que cruza diversos lugares históricos, sitios de batallas y minas abandonadas.
Inmerso en este ambiente, una pareja de académicos encargó este habitáculo para disfrutar la melancolía de la atmósfera.
Habitar mínimo
Para que el encargo fuera factible dentro de un presupuesto acotado se optó por lo mínimo: un lugar para que dos personas pudieran comer, leer y dormir. Se decidió medir cuidadosamente las relaciones del habitáculo con el paisaje inmediato en dos momentos de la experiencia del habitar.
En contraste con la amplitud del exterior, en el nivel de acceso (1) una única ventana sugiere la manera de utilizar un estar de altura inusitada, mientras cocina y baño son comprimidos bajo un altillo. Conduce a él una escala metálica dispuesta en el centro de la planta y en donde (2) se contrapone una altura libre de 1.20mts, apenas lo suficiente para sentarse de manera cómoda, con una vista panorámica del paisaje mediante la doble línea de ventanas horizontales que enmarcan el recorte del cielo contra las montañas.
Construcción
Originalmente la autoconstrucción de una carpa permanente, la cabina se conforma de paneles SIP. Estos módulos prefabricados se ubican y proporcionan levantándose del terreno en pendiente por medio de pilares. La rapidez de la construcción se consideró como esencial, y la estructura fue rápidamente armada por un equipo de 3 personas.
Para evitar productos químicos se utilizó la técnica de quemar la capa superior de la madera de revestimiento, según indican técnicas tradicionales. Esta fina capa de hollín debe proteger a la cabina del deterioro y permitir un envejecimiento natural. Por el interior el revestimiento de paneles de madera terciada ocultan las tuberías de instalaciones, mientras aportan una terminación de calidez.