Descripción de los arquitectos. Una cadena de tiendas departamentales concretó planes para ampliar su espacio de venta. En loque solía ser una plaza abierta, ubicada en la concurrida esquina de Av. De los Insurgentes y Av. Félix Cuevas, se abrió una nueva estación de metro lo que constituyó un aumento en el tránsito de peatones y actividad de transbordo.
Se hizo evidente que el típico modelo de caja cerrada de una tienda departamental tenía que ser cuestionado y había que darle una nueva identidad a la fachada de la tienda existente.
La intervención de Rojkind Arquitectos propone mover programas y funciones, antes confinados al interior de la caja, a un envoltorio permeable y animado, creando una interacción entre el exterior y el interior, participando en la imagen urbana.
En la habitable y permeable fachada, se pueden albergar una variedad de programas temporales, convirtiéndose ésta en un mediador entre la condición urbana y el programa tradicional que sucede en el interior de la tienda.
La fachada de 2.8m de profundidad esta inspirada en patrones moiré y arte óptico y consiste en un sistema de hexágonos de varios tamaños organizados en tres capas fabricadas en fibra de vidrio, acero, aluminio y vidrio.
A los espacios resultantes se accede desde el interior a través de grandes aberturas que revelan el interior de la tienda al transeúnte y viceversa y se conectan entre ellos a través de rampas y escaleras que permiten al usuario navegar la fachada.
Para mantener el proyecto factible, se tomó ventaja de la rica tradición en trabajo de metal y la mano de obra disponibles en México para superar los complejos desafíos en materia de fabricación y presupuesto. El resultado de este modelo al que llamamos “diseño digital/fabricación local” tiene muchas ventajas por sus cualidades altamente tecnológicas y artesanales.
